Garantiza que los productos cumplen con estándares específicos de seguridad, calidad, sostenibilidad y desempeño.
La materia prima utilizada (no sólo en la hoja, sino también en el mango), la dureza de la hoja y el afilado son factores claves a la hora de elegir un cuchillo. Sin embargo, al estar en contacto permanente con alimentos, también es muy importante que atendamos a las condiciones de seguridad en la que fue elaborado.
Existen certificaciones, como NSF International, que aseguran a los proveedores, entes reguladores y consumidores que un producto cumple con estándares específicos de seguridad, calidad, sostenibilidad y desempeño. Se trata de una organización independiente, no gubernamental y sin fines de lucro, que desarrolla programas de certificaciones en salud pública desde 1944.
Para que un producto pueda obtener la certificación NSF debe superar diversas pruebas y evaluaciones, así como inspecciones y auditorías en las fábricas donde fue elaborado.
La línea de cuchillos y chairas que ofrece SIN PAR posee el certificado NSF: en sus hojas lleva grabada la marca de la certificación. Esto garantiza que fueron elaborados con materiales resistentes al desgaste, que no manchan ni se oxidan. Además, sus mangos poseen protección antimicrobiana que evita la proliferación de bacterias.
Fabricados con una aleación especial de acero, permiten cortes exactos y una prolongada vida útil, siendo óptimos para su uso en carnicerías, frigoríficos y supermercados.
NSF International está autorizada por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA), el Standards Council of Canada (SCC), el American National Standards Institute (ANSI) y el International Accreditation Service (IAS). Los laboratorios de NSF están autorizados por la norma ISO/IEC 17025 para el análisis y la calibración.